Un año excepcionalmente malo en rindes y márgenes para los productores, con consecuencias negativas para la economía
La sequía extrema registrada desde 2022 tendrá consecuencias graves sobre la producción y los saldos exportables agrícolas de la Argentina en 2023. El consumo interno seguirá abastecido, aunque al riesgo de mayores precios. Las acciones compensatorias de las políticas públicas se demoraron y los productores se encuentran apremiados por el riesgo de quebrantos. A la vez, mantienen sus reclamos para la unificación cambiaria y la eliminación de las retenciones que afectan su crecimiento de mediano plazo.
La campaña agrícola 21/22 y el comienzo de la campaña 22/23 se desarrollaron enfrentando una situación climática excepcionalmente adversa. Una prolongada sequía que no se registraba desde los últimos 100 años en la zona agrícola núcleo y que llegó luego de dos años de muy escasas lluv...