Buena o mala suerte, pero siempre malas políticas
La gestión kirchnerista de 2003 a 2013 fue un periodo en el que prevaleció la buena suerte para la Argentina, en términos de precios record de las commodities, bajas tasas de interés y alto crecimiento mundial. Todo ello permitió que la economía rebotara desde 2003 del pozo en el que había caído a fines de 2001 y tras el fin de la Convertibilidad. El Ave Fénix resurgió de sus cenizas velozmente no solo por la buena suerte que lo rodeaba, sino porque los sucesivos gobiernos le dieron “rosca” adicional impulsando la demanda en forma extrema. El gasto publico creció en el periodo más de 15 puntos del PBI con medidas estructurales que ya no podrían ser revertidas en el futuro –como duplicar el empleo público y otorgar pensiones a perpetuidad-, asumiendo que los mayores recursos fiscales -que ...